FACTORES PRODUCTIVOS
En economía, se conoce como
factores de producción a los insumos y recursos, tanto humanos como de otra
naturaleza, de cuya disponibilidad y correcto manejo depende la generación de
riquezas en un sistema económico cualquiera. Es decir, se llama así a las
“entradas” de cualquier proceso productivo, sin las
cuales no se puede obtener una “salida”: la satisfacción de las necesidades de
bienes y servicios del ser
humano.
Los factores productivos son tres: Tierra – Trabajo - Capital
TIERRA
La comprensión actual de la necesidad de la tierra se da en un
sentido más amplio que simplemente ser dueño de terrenos. Esto último es
particularmente válido para la producción agropecuaria, pero en el caso de los modelos
industriales o post industriales de producción se refiere más bien a los recursos
que se hallan en la corteza terrestre, y que pueden ser de origen mineral,
orgánico, biológico, etc.
Es decir, desde el petróleo, los distintos minerales, la madera de
los bosques o los frutos cultivados en un sembradío se consideran parte del
factor tierra, y suelen ser considerados el factor básico elemental, el insumo
material primario, a partir del cual se da el proceso de cambios que es la
producción.
Esto, claro, dependerá de la actividad económica a la que nos
refiramos. Por ejemplo, una empresa de software no requerirá
ningún tipo de tierra, más allá del espacio físico en el que asiente sus
oficinas. En cambio, una empresa de bienes raíces considerará la tierra como su
insumo único y primordial.
En particular los recursos no renovables (como los combustibles fósiles) tienen un mercado muy agresivo en su
competencia, y los países que disponen de estos recursos en abundancia
suelen verse favorecidos en sus términos de intercambio. El pago al factor
tierra es el que se debe abonar por la utilización de los recursos naturales.
TRABAJO
El trabajo se refiere a los diversos esfuerzos
que un individuo enfrenta para llevar un producto o servicio hasta el mercado
de consumo, lo cual puede bien darse de muchas maneras. Es trabajo la labor
de producción misma en la que, por ejemplo, un agricultor cultiva ciertos
frutos; pero también la recolección y conducción de dichos frutos al lugar
donde se procesan, y de allí hacia la industria que los convierte en alimentos. Lo mismo ocurre con
el encargado de distribuir estos alimentos, y de venderlos a
los potenciales compradores. Son trabajo también los servicios, de modo que una
empresa de este sector ofrece a sus clientes, esencialmente, un
tipo especializado de trabajo.
En el sistema capitalista, a los trabajadores se les recompensa
por este esfuerzo laboral con un salario, calculado en base a
las horas de trabajo realizadas y al nivel de profesionalización o de
especialización que dicha labor represente. A los trabajadores altamente
calificados se les conoce como capital humano y su generación en un país o
una sociedad es lo que motiva la existencia de un sistema educativo, sobre todo
el orientado hacia los saberes prácticos.
CAPITAL
Por capital se entiende, típicamente, al dinero, o sea,
a los recursos monetarios y financieros que permiten poner a andar un
proceso productivo, ya sea dotándolo de sus insumos básicos o bien
sirviendo para el pago de sus trabajadores.
Sin embargo, el dinero no está directamente involucrado en la producción
de un bien o un servicio, por lo que suele entenderse por capital la
adquisición de los recursos materiales indispensables para que la producción se
dé. Por ejemplo, un tractor es necesario para la producción agrícola, lo mismo que escritorios y computadores para la producción de una empresa de software.
Similarmente, se habla de capital humano para referirse a la
cantidad y calidad de los trabajadores de una organización, así como al dinero que ésta invierte en su educación y mejoramiento profesional, para gozar de una mano de obra más apta y de mayor valor.
A este tipo de recursos se
les conoce como inversión y se les descuenta de las rentas producidas por la empresa para
distinguir entre el capital requerido para la continuación del proceso o
inclusive para su expansión, de las ganancias arrojadas por el proceso productivo.